La lista de organizaciones que se suman a realizar el cálculo de su Huella de Carbono con ALPA, la alianza APAC y ALPA, sigue creciendo. Ya son más de 75 empresas, que a su vez equivalen a más de 250 establecimientos, si tenemos en cuenta las distintas sucursales o unidades de negocio en donde enfocaron sus mediciones.
Constantemente se insiste y se incentiva a las organizaciones a dar este primer paso fundamental para mejorar el desempeño ambiental, ya que a partir de este cálculo es posible definir medidas concretas que persigan el objetivo de la reducción, para finalmente alcanzar la carbono neutralidad.
Dichos establecimientos representan a diversos rubros, como el área de la salud, la educación, el turismo, agricultura y ganadería, la construcción, prestadores de servicios, el sector financiero, de logística portuaria y de transporte, la industria alimentaria, maderera y textil, por mencionar algunos. Y cada uno entiende el efecto que se genera con las personas que lo integran, ya sean sus clientes, sus trabajadores o sus estudiantes, al llevar a cabo este tipo de iniciativas:
“El sector hotelero juega un papel fundamental en la cadena de servicios, y por ende, el impacto que genera en las operaciones de esta industria a nivel global pueden afectar el medio ambiente. Es por esto que consideramos que es importante, y a su vez es nuestra responsabilidad como sector, tomar conciencia sobre este impacto y cómo nuestras acciones diarias pueden revertir de alguna manera el daño ambiental que se ha venido causando a lo largo de los años” – Xochil Aguirre, Gerenta General del Hotel Plaza Colón (Nicaragua)
Todos ellos, desde el lugar que ocupan, entienden la necesidad de disminuir el impacto ambiental que generan las actividades cotidianas, y preservar así nuestro entorno. Por eso, el listado también abarca empresas de distintas magnitudes, cantidad de empleados, y de diferentes nacionalidades: firmas de Uruguay, Paraguay, Panamá, Guatemala o España han llevado adelante procesos más que satisfactorios en su medición de Huella con el equipo de ALPA, la alianza APAC y ALPA.
¿Por qué estas empresas eligen ALPA? En primer lugar, porque sigue estándares internacionales. Pero además, ALPA no solo mide las emisiones relacionadas con aspectos como la disposición de residuos o el consumo de energía, sino que también propone una guía de reducción de emisiones. Esta guía busca no solo minimizar el impacto, sino también promover un cambio de actitud, involucrando a organizadores y asistentes por igual.
En ese sentido, la mayoría de estos actores ya han puesto en marcha todo tipo de acciones para optimizar sus procesos, que en muchos casos tienen que ver con hacer más eficiente el consumo energético, incentivar la movilidad baja en carbono en el traslado de sus empleados, o en separar y minimizar los residuos, entre otras tantas.
“Una de las iniciativas que tomamos en materia de sostenibilidad fue comenzar a incentivar el uso de la bicicleta a través de un programa llamado “Al Trabajo en Bici”, con el fin de acotar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) provenientes del uso del automóvil y la motocicleta” – Natalia Stacul, responsable del área de Sostenibilidad del Banco Coinag.
Si bien celebramos que cada vez más organizaciones tomen conciencia y busquen disminuir su impacto ambiental, es primordial insistir en la implementación de prácticas sostenibles. Como se ha mencionado, la medición es un primer paso importante, que debemos continuar con acciones concretas que incluyan a todos los integrantes de una institución.