Estos pequeños automóviles desatacan por su tamaño compacto, su potencia limitada y su precio reducido
En 2023, los coches eléctricos representaron sólo el 5,6% de la cuota de mercado en España, tras alcanzar las 21.588 unidades matriculadas. A pesar de que cada vez se venden más coches eléctricos, lo cierto es que el elevado precio de los modelos cero emisiones y la falta de infraestructura de recarga en nuestro país hacen que los conductores todavía sientan cierta desconfianza a la hora de adquirir un vehículo eléctrico.
En este contexto, la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) ha propuesto la creación de un plan especial para coches eléctricos de tamaño y potencia reducidos, tomando como referencia a los ‘kei cars’, los populares coches japoneses que llevan décadas liderando el mercado del país asiático por su ajustado precio y sus reducidas dimensiones.
¿Qué son los ‘kei cars’ y por qué son tan populares en Japón?
Los ‘kei cars’ son unos pequeños automóviles que desatacan por su tamaño compacto, su forma cuadrada y su potencia limitada. De hecho, la palabra ‘kei’ proviene del japonés 軽自動車 (Keijidōsha), que significa coche ligero. Estos vehículos tan peculiares surgieron tras la Segunda Guerra Mundial, época en la que Japón se enfrentaba a grandes dificultades económicas y escasez de recursos. Así que para estimular la economía y mejorar la vida de sus ciudadanos, Japón promovió la producción de coches asequibles y de dimensiones reducidas.
Los ‘kei cars’ siguen siendo actualmente los vehículos más populares de Japón, incluso en el mercado eléctrico. De hecho, en 2023, el mercado japonés alcanzó un récord de 88.535 vehículos eléctricos vendidos y de ese número, el 50,3% correspondió a ‘kei cars’. Y es que estos pequeños vehículos disfrutan de una serie de beneficios fiscales que los hace muy atractivos para los conductores:
- Seguros más económicos: los propietarios de ‘kei cars’ pagan primas de seguro más bajas.
- Peajes reducidos: si viajas en un ‘kei car’ los peajes son más asequibles.
- Sin necesidad de justificar aparcamiento: a diferencia de lo que sucede con otros vehículos japoneses, para comprar un ‘kei car’ no es necesario demostrar la posesión de una plaza de aparcamiento. Ten en cuenta que Japón es una isla en la que el espacio está muy limitado y las plazas de aparcamiento cuestan una fortuna.
- Impuesto de compra reducido: el impuesto de adquisición es menor para este tipo de vehículos.
Características de los ‘kei cars’
A lo largo de la historia, las regulaciones para los ‘kei cars’ han evolucionado. Inicialmente, cuatro años después de que acabase la Segunda Guerra Mundial, los ‘kei cars’ no podían medir más de 2,8 metros de largo, 2 metros de alto y 1 metro de ancho. Además, sus motores estaban limitados a una cilindrada de 150 cc para los propulsores de cuatro tiempos o 100 cc para los de dos tiempos.
Tras varias revisiones que tuvieron lugar en años sucesivos, finalmente, desde 1998 los ‘kei cars’ deben cumplir las siguientes características:
- 3,4 metros de largo
- 2 metros de alto
- 1,48 metros de ancho
- Motor de 660 cc
- Potencia de 64 caballos
Marcas como Honda, Suzuki, Mazda, Mitsubishi, Nissan, Toyota, Subaru o Daihatsu, entre otras, ofrecen ‘kei cars’ en Japón. La gran demanda y popularidad de estos microcoches cuadrados ha permitido que cada vez se ofrezcan con mayor equipación, mejores acabados y también con motorizaciones eléctricas.
¿Los ‘kei cars’ llegarán a España?
El mercado europeo de coches eléctricos es bastante distinto al japonés, así como los intereses de los conductores. Por ello, las limitaciones de los ‘kei cars’ japoneses llevan décadas sin encajar en Europa. No obstante, los cambios que se están produciendo últimamente en el mercado europeo en términos de movilidad, así como las restricciones a los coches contaminantes y la implantación de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en las grandes ciudades españolas, puede que abran la puerta a la migración de los ‘kei cars’ eléctricos a nuestro mercado.
Y es que estos pequeños, prácticos, eficientes y económicos vehículos encajarían perfectamente con la movilidad urbana sin emisiones hacia la que se encamina nuestro mercado. Así que no podemos descartar la posibilidad de que estos pequeños coches eléctricos encuentren su camino hacia nuestras carreteras en el futuro.
Fuente: neomotor.epe.es